La Confederación de Empresarios Privados de Bolivia, a través de un comunicado expresó su rechazo al acuerdo entre el gobierno y la Central Obrera Boliviana, que establece un incremento salarial de 2% al mínimo nacional, mismo que incidiría también en bonos como el de antigüedad y subsidio de lactancia.
Afirman que esta determinación «desestima de manera irresponsable los datos que evidencian la extrema gravedad de la situación económica, así como los pedidos y advertencias de los sectores productivos y los microempresarios».
En el comunicado también advierten que estas decisiones sin consenso y con una perspectiva política tendrán «graves consecuencias», ya que están afectando la situación de las empresas y emprendimientos.