Rubén Gutiérrez, padre de la niña atropellada, dijo estar contento y con esperanzas por la visita del fiscal departamental, ahora confía que la señora Vanesa Sosa aparezca ya que hasta la fecha hay una deuda de Bs. 10.000 en el Hospital del Niño.
El papá de la menor relata que su hija le dice: «papito no llores, no me he muerto todavía» espera que la culpable dé la cara el día viernes ya que después del hecho de tránsito el pasado 2 de mayo, Vanesa Sosa Melgar, no apareció para asistirlos en los medicamentos que demandan las curaciones diarias.